[Documento] ¿Nunca más?

Aunque el transporte por barco sea considerado por la UE como sostenible, no cabe duda de que la dependencia que tenemos de combustibles fósiles está matando nuestro mar.

Tras diez años de la catástrofe del Prestige, se aceleraron las directivas sobre la seguridad de los buques, pero el trasiego de combustible sigue generando graves problemas en nuestro litoral. Espacios protegidos que se caracterizan por su gran diversidad, tanto en flora como en fauna, que son exclusivos de nuestras costas, además de ser lugares de paso para numerosas aves migratorias y especies marinas, siguen contaminándose por este trasiego. Así pues, es imprescindible elegir las técnicas de protección más adecuadas, sin tanta dependencia de los combustibles fósiles para la navegación marítima.

Pero con el desarrollo de los complejos petroquímicos se opta por un modelo concreto de producción y desarrollo dependiente de los combustibles fósiles, y los buques son un eslabón central de esa cadena.

El intenso tráfico marítimo por nuestras costas cargadas de combustible ha contribuido a convertir zonas, como La Bahía de Algeciras en la «gasolinera» entre el Atlántico y el Mediterráneo, pues por ella trasiegan más de 25 millones de toneladas (Tn) de hidrocarburos al año, siendo el Estrecho de Gibraltar un paso de 90 superpetroleros al día, que en los últimos años han provocado cientos de vertidos al mar. Este estrés ambiental debido a este ir y venir se ve aumentado por la forma de hacer avituallamiento a través de «Gasolineras Flotantes», buques que cargan 100.000 Tn de combustible y hacen bunkerig fondeados todos los días, al este y entre el North Mole y la bocana de Gibraltar, en aguas de nadie. En 1990 se trasvasaron 0,8 millones de Tn, en el 2011 más de 5 millones de Toneladas. Se hicieron más de 8.000 trasvases en alta mar y más de 5.000 en la Bahía de Algeciras. Estas, sumadas a las que hacen ellos entre sus buques, son más de «60.000» descargas de buque a buque aproximadamente» en el mar.

Después de haber denunciado la situación a todas las administraciones, después de haber denunciado año tras año vertido tras vertido, después de que toda España se ha estremecido por el desastre del Prestige, del buque Sierra Nava, Samothraki, New Flame, Fredra, seguimos despertándonos con accidentes y vertidos de estos petroleros que trasiegan combustible a destajo.

Y este no es el único caso. Anualmente pasan unos 45.000 buques por el Dispositivo de Separación de Tráfico de Fisterra, 15.000 de ellos con mercancías peligrosas. Por el archipiélago Canario, 3.670 buques transportan 75 millones de toneladas de crudo y otros productos al año, en el levante español, en el Cantábrico… seguimos teniendo los mismos problemas que hace 10 años después del naufragio del Prestige. Esto provoca que la situación en el litoral sea verdaderamente insostenible.

Antonio Muñoz. Ecologistas en Acción de Campo de Gibraltar