La Sala de Valladolid del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Castilla y León ha ordenado la suspensión de un plan urbanístico que estaba a punto de ser desarrollado en el Campo Charro salmantino sobre un encinar maduro para crear una urbanización de lujo, similar a otra ya ejecutada en Extremadura, sobre terrenos de alto valor ambiental, utilizando la ingeniosa fórmula del Plan de Protección del Suelo Rústico.

Bajo la denominación de Plan Especial de Protección de Zona Rústica «Dehesa de La Mora», en el municipio salmantino de Las Veguillas, a 33 kilómetros al sureste de Salamanca capital, la empresa Bosques Civilizados, S.L consiguió la aprobación el 17 de julio de 2012, de una urbanización de lujo de 103 hectáreas de «encinar maduro de alto valor ecológico» para la construcción de 12 viviendas de segunda residencia sobre parcelas de 10 hectáreas, que incluían otros 4.000 metros cuadrados de instalaciones y construcciones de uso agropecuario indeterminado, la apertura de caminos y la instalación de redes de agua y otros servicios urbanísticos.

Con la experiencia de otro plan similar ejecutado en Extremadura, inicialmente el promotor, que había obtenido una licencia para un chalet en el monte y que pretendía hacer otros 16, llevó a cabo una parcelación urbanística del monte en 2007, pero la Comisión de Urbanismo de Salamanca, dependiente de la Junta de Castilla y León, denegó las autorizaciones para las viviendas y orientó la solución hacia la presentación de un plan de urbanización conjunta para dar servicio a 12 viviendas en el bosque.

Sometido el proyecto a Evaluación de Impacto Ambiental, el Delegado Territorial de la Junta de Castilla y León en Salamanca emitió una Declaración de Impacto Ambiental favorable (BOCyL de 12 agosto 2010) a pesar de la existencia de informes desfavorables de los técnicos de Medio Ambiente del Servicio Territorial, que alertaban sobre el impacto ambiental severo a los valores naturales del entorno en 2009 y de que concluían, en junio de 2010, que «el previsible impacto sobre la vegetación adulta y el regenerado, tanto en la fase de construcción como en la de ocupación de las viviendas e infraestructuras asociadas, es incompatible con el mantenimiento y mejora del terreno rústico y forestal, que configura el monte Dehesa de Mora”.

No obstante la impugnación del Plan Especial por la Federación de Ecologistas en Acción de Castilla y León, la Comisión de Urbanismo de Salamanca concedió en marzo de 2013 la autorización para construir las 12 viviendas. En la página web del promotor http://bosquescivilizados.net/ se sigue promocionando la venta de la «eminencia rural»: «un nuevo modelo de gestión integrada de fincas particulares con casas de un diseño maravilloso, situadas en espacios naturales protegidos», donde para nuestros selectos clientes «creamos una parque natural privado y protegido».

Frente a este despropósito, el TSJ ha ordenando la suspensión del Plan urbanístico, sin fianza, hasta que se dicte sentencia. Sin la presentación del recurso el plan se hubiera ejecutado como tantos otros.