[Concurso] Archivo gráfico y Calendario 2017
En On-line
Del 4 de octubre de 2016 / 00:00
al 4 de octubre de 2016

Ecologistas en Acción, como parte de su campaña a favor de la biodiversidad y contra las especies invasoras te invita a participar con tus fotos en la elaboración de un archivo gráfico y su calendario 2017.

1. Podrá participar todo el mundo. Se aceptan imágenes retocadas y que se han presentado a otros concursos. Se valorará especialmente la realidad del daño que producen las especies invasoras en la biodiversidad, en las especies autóctonas y en nuestra sociedad.

2. Todas la fotografías recibidas se incluiran en un fondo documental sobre las especies invasoras (con el nombre de su autor o autora) y de ellas Ecologistas en Acción seleccionará al menos 12 para su calendario de 2017.

3. Quienes participen deben poseer los derechos sobre las fotografías presentadas. La organización no se responsabiliza de la presentación de fotografías que no sean de su propiedad.

4. Las fotografías se entregarán en formato JPG mediante el formulario que se encuentra en la parte inferior de esta página. Cada autor o autora podrá presentar todas las fotografías que quiera, siempre que sean de diferentes especies invasoras e indicando su nombre y dirección postal (si se desea recibir el calendario), así como el lugar donde fue tomada la imagen asi como los datos que considere de interés.

5. Se pueden enviar fotos hasta el 4 de octubre de 2016, Día Mundial de los Animales.

6. Solo por el hecho de participar se recibirá un calendario y las fotos seleccionadas para dicho calendario recibirán una suscripción por un año a la revista Ecologista.

7. Derechos de reproducción y comunicación pública sobre las obras fotográficas: La participación conlleva el consentimiento para que tu nombre e imagen puedan ser utilizadas en los medios de difusión de Ecologistas en Acción con fines educativos.

8. Las personas que participen en este concurso se comprometen a cumplir el código ético de la Asociación Española de Fotógrafos de Naturaleza [1].

8. Por el mero hecho de participar se aceptan incondicional e íntegramente los puntos anteriores.

[1] Código ético
El respeto por la naturaleza debe prevalecer sobre cualquier actividad desarrollada en el entorno natural. El presente código ético es la declaración de principios básicos para la práctica de nuestra actividad que establece AEFONA con el fin de instar a todos sus socios y seguidores a que lo asuman como un compromiso personal. Como miembros de la Asociación Española de Fotógrafos de Naturaleza (AEFONA), debemos mantener los más altos estándares éticos en diversos ámbitos de actuación, con el ánimo de ser un ejemplo de integridad y comportamiento, especialmente para las nuevas generaciones de fotógrafos.

1. El fotógrafo de la naturaleza debe reflejar fielmente las situaciones naturales y evitar sufrimientos, perturbaciones o interferencias en el comportamiento de los seres vivos, teniendo como principal lema que la seguridad del sujeto debe primar sobre la obtención de una imagen. En el caso de fotografiar especies animales en cautividad, privadas temporalmente de libertad, manejadas o cultivadas, en caso de plantas, debe especificarlo.

2. El conocimiento amortigua los impactos. El fotógrafo de naturaleza no solo debe aprender las técnicas necesarias, sino que debiera esforzarse por documentarse y conocer el comportamiento, biología y requerimientos de la especie. Buscar el apoyo de personas experimentadas y perfeccionarse en este conocimiento debiera ser vocación de todo fotógrafo de la naturaleza.

3. Debemos dar ejemplo con nuestras actitudes. El fotógrafo debe obtener los permisos pertinentes, especialmente en el caso de especies protegidas, y conocer la normativa de los espacios naturales, especialmente en las áreas protegidas donde se desarrolle nuestra actividad. Asimismo resulta recomendable colaborar con la guardería local.

4. El respeto y la conservación de la integridad del paisaje y su valores patrimoniales (patrimonio arqueológico, formaciones geológicas, elementos minerales, etc) debe prevalecer sobre la práctica de la fotografía. Se evitará cualquier alteración o manipulación irreversible. No debemos dejar ningún tipo de residuo en la naturaleza. Las plantas también son seres vivos, que merecen toda nuestra consideración. Siempre es mejor apartar o sujetar ramas, que cortarlas o arrancarlas, aunque se trate de especies comunes. La vida es tan valiosa en especies escasas como en especies comunes. La ocultación de escondites y observatorios debe hacerse con ramas secas, balas de paja, materiales inorgánicos…

5. Una perturbación específica a evitar es la excesiva proximidad al sujeto, que produce estrés, intimidación, modificaciones de la actividad y, sobre todo, habituación a la presencia humana. El uso de reclamos sonoros con cantos de aves está especialmente desaconsejado en época de cría, por el impacto negativo que tiene sobre la avifauna. El fotógrafo experimentado debe aprender a reconocer los indicios de estrés y evitarlos.

6. Hay que prestar una especial atención en las circunstancias en las que los seres vivos pueden ser más vulnerables, como en época de nidificación, de muda del plumaje o ante condiciones meteorológicas desfavorables. Se desaconseja la fotografía de aves en sus nidos. La alteración del entorno de un nido y la presencia visible del fotógrafo o su equipo puede llamar la atención de otras personas o depredadores sobre el sujeto y debe evitarse.

7. No es aconsejable alimentar a la fauna salvaje para la realización de actividades fotográficas, ya que puede crear notables alteraciones en individuos y poblaciones, introducir enfermedades y ocasionar accidentes o comportamientos no naturales. El uso de animales utilizados como cebos vivos, con su capacidad de escape limitada, es una práctica considerada como poco ética y que debe ser informada por el autor en la imagen.

8. No es práctica recomendable extraer ejemplares de su hábitat o trasladarlos del lugar o circunstancias en las que se encuentren para tomar imágenes en otro lugar despejado o, incluso en estudio o terrario, ya que se produce estrés, se pone en peligro al animal y, además, no se documentan debidamente las circunstancias naturales en las que habita.

9. Los centros especiales donde se mantienen especies animales en cautividad tienen una normativa precisa para los visitantes que debemos conocer y cumplir. Algunas iniciativas priorizan la actividad económica sobre su inherente función educativa o el bienestar de los animales; si acudimos a ellos estamos fomentando su explotación. En el caso de seres vivos, el autor debe expresar claramente en qué condiciones y contexto obtuvo la imagen y si ésta procede de animales en cautividad o con su libertad restringida en algún modo.

10. La postura de los fotógrafos de naturaleza, de respeto y no intromisión en cualquier manifestación de la naturaleza, ha de estar argumentada y debiera ser objeto de divulgación a través de nuestras herramientas: reportajes, exposiciones, audiovisuales… Ante cualquier infracción o situación indeseable, incluidas las actuaciones al margen de la legalidad vigente que pudieran realizar otros fotógrafos, debemos informar a las autoridades.