Una vez que la empresa Recuperación de Materiales Diversos, S.A. (RMD) ha perdido el contencioso ante el TSJ, en abril, y sin que haya interpuesto Recurso de Casación, Ecologistas en Acción de León ha solicitado a la Junta la ejecución, en sus propios términos, de la Resolución de la Dirección General de Calidad y Sostenibilidad Ambiental de 9 de enero de 2014, obligando a la mercantil a retirar los residuos enterrados clandestinamente, pues debería haberlo hecho ya antes de enero del 2015.

Por toda acción, hasta ahora, RMD solo ha practicado unas catas en el terreno (tapadas de nuevo) que hacen pensar en un “paripé”.

En efecto, no alcanzamos a comprender la intención de estas catas, ni podemos relacionarlas con el objetivo de eliminar los residuos enterrados, habida cuenta de que el subsuelo está “tapizado” por una gruesa capa continua de residuos cuya completa eliminación no es posible desde puntos concretos salpicados por la finca, sino mediante el levantamiento total de toda la tierra que en su día se vertió (entre uno y dos metros de grosor) sobre las masas de residuo esparcidas por el suelo del vertedero (incluso montones sin esparcir y grandes pozos), en unas 5 hectáreas. Lo lógico sería empezar desmontando por un lateral, e ir levantando, a hecho, la capa de tierra que hay sobre la granalla y retirar ésta.

A pesar de numerosas denuncias sobre el enterramiento, y de personarnos en el contencioso, nada se nos ha comunicado desde la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, por lo que en éste último escrito hemos solicitado que se nos tenga como Parte Interesada en la implementación de la citada Resolución y se nos notifiquen cuantas actuaciones tengan que ver con la misma, incluyendo las labores que ya hayan sido realizadas al respecto, su objeto, y el plan de acción global para efectuar la eliminación completa de los residuos enterrados.

La Universidad de León ya informaba, en el 2008, que las aguas subterráneas estaban contaminadas por metales pesados, como cobre, cinc y plomo, muy peligrosos para la salud, aguas que pueden estar usándose para riego o consumo directo, con riesgo para la salud humana y el medio ambiente.

Es intención de esta asociación vigilar el seguimiento de las labores de extracción para que sea efectiva y completa, e informará a la Comisión Europea si la Junta no nos considera Parte Interesada, y no exigiera rigurosamente la eliminación total de los residuos, incluyendo los grandes pozos ocultos a más profundidad, para que los metales tóxicos dejen de progresar por el terreno y acuíferos.