Toniza-Ecologistas en Acción de Chiclana ha acogido con satisfacción la puesta en marcha del Plan Municipal de Vivienda y Suelo (PMVS), a pesar de llevar más de un lustro de retraso, cuyo anuncio fue efectuado por la Delegada de Vivienda, Carmen Jiménez, el pasado 26 de junio, abriéndose el plazo de propuestas previas hasta el 31 de julio. Toniza-Ecologistas en Acción entiende, no obstante, que “dada la importancia del Plan, su inicio, debería haberse acordado en un Pleno Municipal en el que, además, los diferentes grupos políticos hubiesen expresado su compromiso a medio y largo plazo para llevar adelante en los próximos años las actuaciones que programase el PMVS”. Actuaciones que, en opinión de Toniza-Ecologistas en Acción, tendrían que tener como principal objetivo “hacer efectivo el derecho universal a una vivienda digna”.

El PMVS, afirman, “debería contar con un Plan de Participación Ciudadana. El PMVS lo indica pero no lo diseña. Sin embargo, estamos a tiempo para las próximas fases”. Consideran que se ha procedido con cierta precipitación y que por eso se desconoce el procedimiento de participación que ha abierto la Delegación de Vivienda a diferencia de lo que ocurrió con la Ordenanza de Terrazas. Ésta es una de las razones por las que la consulta pública “ha quedado completamente en una situación de ambigüedad”. Aun así, Toniza-Ecologistas en Acción ha instado a la Delegación de Vivienda a “presentar un Plan de Participación Ciudadana que haga posible y asegure, de manera especial, la implicación de los demandantes de vivienda que son los más directamente afectados por la futura norma”. Esta exigencia está recogida tanto en la Ley 1/2010 Reguladora del Derecho a la Vivienda en Andalucía como en el Decreto 141/2016 por el que se regula el Plan de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía 2016-2020.

Entre la numerosas y variadas sugerencias y propuestas que aportan los ecologistas destacan las referidas a la juventud. El último informe del Consejo de la Juventud de Andalucía sostiene que el 82% de los jóvenes andaluces menores de 35 años no pueden emanciparse. Muchos de ellos, aun trabajando, no rebasan el umbral de la pobreza. Mientras los europeos del norte se emancipan entre los 19 y 20 años los andaluces nos acercamos peligrosamente a los 35. “La crisis”, apostilla Toniza-Ecologistas en Acción, “sigue golpeando a los jóvenes y, debido a la estructura económica de Chiclana, aquí con mayor virulencia”. Tras criticar que la Delegación de Vivienda no haya desagregado los datos por sexo y edad aseguran que “si lo hubiese hecho, los jóvenes, de manera particular las mujeres, estarían en los escalafones inferiores”. Proponen que la Delegación de Juventud elabore “programas de información en materia de vivienda, especialmente dirigidos a los jóvenes, que promocionen la emancipación en condiciones dignas; campañas (edición de guías, encuentros, conciertos…) para promover la inscripción de los jóvenes en el Registro Municipal de Demandantes de Vivienda Protegida (RMDVP), para ofrecer información, asesoramiento, ayuda, etc. con el objetivo de favorecer el acceso a una vivienda en régimen de alquiler destinada a los jóvenes con escasos medios económicos”.

También denuncian las acuciantes necesidades de determinados colectivos en riesgo de exclusión social y residencial, por eso los ecologistas recomiendan que se lleven a cabo, con la mayor celeridad posible, “las dos actuaciones previstas en el PGOU en suelos dotacionales de propiedad municipal para construir 129 alojamientos transitorios”. Estos alojamientos estarían destinados a paliar provisionalmente las situaciones más excepcionales y graves que padecen muchos chiclaneros.

Asimismo, Toniza-Ecologistas en Acción manifiesta ser consciente de la injusta y desgarradora situación que están sufriendo muchas personas con movilidad reducida que viven en edificios sin los más elementales requisitos de accesibilidad. De manera concreta sugieren, entre otros, que la Delegación de Vivienda “empiece planificada y escalonadamente a instalar ascensores donde fuera necesario y más urgente”.

Por último, los ecologistas esperan que la ciudadanía asuma que si queremos poner fin a esta lacra social “el derecho a la vivienda tiene que alcanzar el mismo grado de protección que el derecho a la salud o a la educación”.