La Comunidad de Regantes de la Huerta de Ricote ha realizado el desvío de las aguas de la Fuente Grande por medio de una tubería, desecando así la canalización tradicional por donde lo venía haciendo desde tiempo inmemorial, a través de la cual se alimentaba el antiguo Lavadero Público y los Molinos, en un enclave que conforma un conjunto etnográfico único.

Desde Ecologistas en Acción del Valle de Ricote manifestamos nuestra preocupación ante el recientemente desvío de las aguas de la Fuente Grande de Ricote, hacia una nueva tubería que recoge el agua directamente desde el manantial y lo conduce a una de las dos balsas de riego que posee la Comunidad de Regantes de la Huerta de Ricote. A consecuencia de esta actuación, llevada a cabo por dicha entidad, el agua ha dejado de discurrir por la canalización tradicional por donde lo venía haciendo desde tiempo inmemorial, a través de la cual se alimentaba el antiguo Lavadero Público y los Molinos, en un enclave que conforma un conjunto etnográfico único.

Esta grave alteración del sistema hidráulico supone una importante pérdida patrimonial y de un recurso ecoturístico de primer orden para el pueblo de Ricote, ya que conllevará la progresiva degradación y destrucción del sistema hidráulico del molino de Ricote, documentado a principios del siglo XVI, pero con toda seguridad ya existía anteriormente, siendo uno de los más completos que se conocen en la Región de Murcia.

La Huerta de Ricote, asociada a este sistema hidráulico, es un regadío histórico, la mayor huerta de origen andalusí estudiada en España se encuentra una huerta cultivada, cuyo origen podría remontarse al siglo VIII, según los últimos estudios realizados. Aúna aspectos culturales, tecnológicos, etnográficos y paisajísticos, así como la antigüedad y su adaptación al medio. Es abastecida con recursos hídricos locales, con infraestructuras tradicionales (balsas y caños de piedra), desarrolladas por la población local. El plan de modernización ejecutado hace unos años respetó las antiguas infraestructuras y el sistema hidráulico al que ahora se le ha retirado el agua. El motivo esgrimido para ello han sido las pérdidas de agua, sin embargo, esto es algo perfectamente evitable de dos formas:

  1. Una buena gestión de los canales de riego tradicionales requieren un mínimo mantenimiento y de pequeñas actuaciones de reparación en el tiempo si se quieren evitar las pérdidas. Lo que es imposible es no acometer este tipo de trabajos y pretender que no haya pérdida alguna de recurso hídrico, siendo un recurso tan valioso.
  2. Realizar la nueva conducción del agua, pero recuperando el trazado original del sistema hidráulico, restaurando las antiguas conducciones, sustituyendo aquellas modernas que estén en mal uso, y garantizando el discurrir del agua por donde siempre lo ha hecho. Esta opción es algo más costosa económicamente, pero no mucho más, para lo cual también requiere la implicación de todos los organismos públicos, Ayuntamiento y Comunidad Autónoma.

De esta forma se podría recuperar el entorno, beneficiando a todos, evitando pérdidas de agua por el mal estado de la instalación, a su vez que mantenemos y mejoramos un paraje propio de nuestro pueblo y de gran atractivo turístico.

Tradicionalmente, desde Ecologistas en Acción hemos defendido el mantenimiento y conservación de los denominados regadíos tradicionales. Debido al gran valor (ecológico y patrimonial) de estos agroecosistemas, y el profundo grado de abandono y degradación en el que a menudo se encuentran las infraestructuras tradicionales de regadío que los conforman, se hace necesario un esfuerzo de cara a la revitalización de estos espacios.

Apostamos por el mantenimiento y preservación de los regadíos tradicionales, y que en las mejoras que se realicen prime la recuperación, mantenimiento y mejora ambiental de las estructuras tradicionales que conforman el sistema de riego, respetándose los elementos constructivos tradicionales existentes, evitando la degradación y destrucción del patrimonio asociado, así como de la vegetación y fauna autóctona existente propia de estas zonas.

Por todo ello solicitamos la implicación de todos los organismos públicos, tanto a nivel local como autonómico, su implicación en la recuperación del entorno del conjunto hidráulico y etnográfico de los molinos de Ricote:

  • Recuperando el paso del agua a través del sistema hidráulico de los Molinos y el Lavadero de Ricote.
  • Recuperando el entorno para garantizar su buen estado a largo plazo, así como las iniciativas de turismo ecológico, agrario, turismo de naturaleza medioambiental y todas aquellas que promuevan el acercamiento de la población al conocimiento de un sistema hidráulico y su explotación integral: lavado, riego y molienda, como garantía para su conservación.