El Ayuntamiento de Mairena del Aljarafe elimina árboles de medio siglo para acicalar aceras sumándose a la fiebre arboricida de gran número de Ayuntamientos apostando por políticas contrarias a mitigar los efectos del Cambio Climático en lo municipios de la provincia de Sevilla.

El Ayuntamiento de Mairena del Aljarafe comenzó ayer una nueva tala de grandes árboles en el tramo central de la C/ Ciaurriz, ante la impotente indignación de vecinas y vecinos. En esta ocasión se trata de una docena de árboles de gran porte y edad, magníficos ejemplares sanos y frondosos, entre los que se encuentran siete Tipuanas y algún Paraiso.

El motivo, según informa el Ayuntamiento, es la renovación del acerado y accesos a las viviendas, junto con un tramo de carril bici.

De forma totalmente injustificable, se destruye de nuevo un patrimonio arbóreo de Mairena que presta un servicio esencial a la ciudadanía. Evitar este ataque al patrimonio tan sólo habría requerido una planificación racional al tratarse de una simple intervención de mejora del acerado y carril bici.

Lo preocupante es que no parece que hubiera por parte del consistorio el menor interés en planificar teniendo en cuenta los árboles, lo que viene a confirmar el historial municipal de eliminación sistemática, sostenida en el tiempo, masiva, de cada uno de los árboles de mayor edad y porte del municipio, un patrimonio que hacía de Mairena una población de excepcional riqueza en términos de vegetación.

En contra de todas las perspectivas urbanísticas actuales determinadas por el cambio climático, entre otros, el Ayuntamiento de Mairena parece haber optado por el derroche vandálico de las masas arbóreas heredadas para transformar el viario en “patios” duros salpicados de arbolitos de macetero.

El historial viene de lejos, en esa misma calle Ciaurriz ya se eliminaron otros muchos grandes árboles en el tramo inicial, cercano a San Juan, y otros se han ido talando en forma de “goteo” en distintos puntos de la calle con el resultado de transformar una boscosa avenida en dura solana.

Hay que recordar también que en el caso de Simón Verde el arboricidio ataca la gran pantalla filtrante y limpiadora que representa esa gran arboleda interpuesta entre Sevilla y Mairena.

El mismo tipo de intervenciones han ido arrasando la C/ Moraima, con unos 40 árboles de gran porte abatidos solo en 2015, ocurriendo igual por todo el viario de Simón Verde -el cual, más que un barrio, es o más bien era, un peculiar “bosque habitado” por su masa arbórea incomparable, con todos los servicios que ésta supone.

En otras zonas del municipio, múltiples calles y avenidas han sido “desarboladas” al completo de una sola vez, en lugar de “por partes”: desde el boulevard de Ciudad Expo, pasando por la Avda. Sofía de Barat o la Avda. de La Constitución -ambas pasando de ser vias sombreadas y frondosas a eriales, precisamente cuando pasa por ellas el carril bici.

Toadas estas actuaciones contrastan con la publicidad del gobierno municipal y su proyecto de una Mairena “Más Verde y menos gris” y hace de la Declaración de los Derechos del Árbol, que enarboló el consistorio como “pionera”, una simple pantalla tras la que perpetrar todo tipo de “arboricidios”.

Para Ecologistas en Acción, los múltiples casos de arboricidios que vienen ocurriendo: San Juan de Aznalfarache, Écija, Dos Hermanas, Castilleja de la Cuesta, Sevilla, Tocina, Utrera y este último de Mairena del Aljarafe, vienen a demostrar la necesidad de una ley andaluza de arbolado urbano que dé protección efectiva a este patrimonio natural y que permita exigir responsabilidades legales a los responsables municipales que autoricen la tala de árboles sin la correspondiente justificación técnica y sin acatar los condicionados que se establezcan.