El Rincón Lento de Guadalajara, la maquinaria de los sueños.

elrinconlento@gmail.com . Revista El Ecologista nº 80.

El Rincón Lento es un espacio en el centro de Guadalajara que trabaja para la transformación social de la ciudad y sus habitantes. Es un pulmón verde en medio de tanto hormigón y pensamientos igualmente grises. Está dedicado al consumo responsable, la difusión cultural y la creación de redes entre personas y colectivos. Lo forman más de trescientos socios y socias, simpatizantes y hasta algunos detractores.

En el Rincón Lento puede pasar casi cualquier cosa. Puede ocurrir hasta aquello que siempre imaginaste como una utopía. Es un punto de encuentro entre personas y colectivos que creen en un mundo mejor, y se mueven para lograrlo.

El proyecto nace del esfuerzo y trabajo conjunto de dos asociaciones de Guadalajara: Altrantrán y Muévete por un mundo… En junio de 2009 se inauguraba el local de la calle Cronista Juan Catalina. Poco a poco se fue reflejando en el local la filosofía del proyecto, centrado en la lentitud (pero no como pereza o torpeza, sino casi todo lo contrario). La lentitud entendida como mimo por las cosas, como control del tiempo, de la calidad del mismo. Lentitud como respeto al medio ambiente y a las personas, como decrecimiento e ideas.

La participación ciudadana y el fomento del pensamiento crítico es algo que está muy presente en el Rincón. Cada mes, tiene lugar una reunión para programar actividades y solucionar cosas que van surgiendo, y en esa asamblea participan todos los socios y socias que lo desean: proponiendo, evaluando, aportando ideas y soluciones.

Un proyecto que se consolida

En estos cuatro años, el número se socios y socias ha crecido mucho. Se ha acercado hasta el local mucha gente variopinta e interesante, muchas mentes inquietas que deseaban que existiera un espacio así en su ciudad. La colaboración con los distintos colectivos de nuestra zona, e incluso con otros de otras comunidades autónomas, es constante y fructífera. De la misma forma, ha crecido mucho la participación voluntaria, teniendo un papel clave en el proyecto.

En El Rincón Lento se puede ir a charlar (en castellano o en inglés), a aprender percusión, recoger tu cesta de verdura ecológica, asistir a un taller de reciclaje o a un curso de cocina vegetariana. Se puede participar en el huerto, unirse a las excursiones, asistir a un debate, proponer una charla sobre un tema que nos apasione. Se pueden tener cuatro añitos, o noventa. Se puede ser de Guadalajara o de cualquier otro rincón del mundo.

Se puede hacer casi cualquier cosa, pero eso sí, lentamente. Son gente soñadora, y a la que no le importa pensar bien las cosas antes de hacerlas. En el Rincón se avanza lento, porque se va lejos. Importan los fines y los porqués, pero sobre todo importan los medios, y el viaje para alcanzarlos. El cambio ya está aquí, e iniciativas como esta proponen un mundo más humano, más justo y sostenible.

El Rincón Lento y su filosofía es un proyecto local, pero está suscitando interés en colectivos de otras ciudades, que quieren tener su propio Rincón. Poco a poco la red lenta se extiende (Toledo, Alcalá de Henares, Asturias…), demostrando que los proyectos con alma pueden sobrevivir, y lo que es más importante, deben hacerlo. Va en ello sueños y utopías, que toda sociedad debe tener para seguir viva.