Durante tres jornadas seguidas, del viernes 4 al domingo 6 de marzo, un miembro de Ecologistas en Acción de Miraflores de la Sierra recorrerá, en solitario, ciento veinticuatro kilómetros esquiando por la dorsal de la Sierra de Guadarrama, desde Somosierra a San Lorenzo de El Escorial. El objetivo es reclamar un uso respetuoso de la Sierra de Guadarrama y la recuperación del espíritu de la Institución Libre de Enseñanza.

La Sierra de Guadarrama es uno de los enclaves naturales más hermosos y sensibles de la Comunidad de Madrid. Sin embargo en los últimos tiempos se está produciendo un aprovechamiento exagerado e insostenible de sus recursos. Esta dinámica genera una excesiva presión turística y ha disparado los usos recreativos sobre este frágil ecosistema de montaña. Los resultados son la masificación y la pérdida de sus valores ambientales, culturales y paisajísticos, lo que en un círculo vicioso, lleva a degradar incluso su atractivo turístico.

Félix Sánchez Constenla, un histórico miembro de Ecologistas en Acción y deportista polifacético hace autocrítica del sector. Lamenta el terrible impacto causado por las instalaciones de esquí alpino en el puerto de Navacerrada y rechaza las, cada vez, más frecuentes, multitudinarias y lucrativas pruebas deportivas en el Parque Nacional. Le entristece la masificación de enclaves emblemáticos como La Pedriza donde todos contribuimos a su deterioro, incluidos los montañeros y escaladores.

En este contexto, el deportista, vuelve la mirada hacia la Institución Libre de Enseñanza que con sus excursiones pedagógicas en la Sierra de Guadarrama (la primera se realizó en julio de 1883), sentó las bases de lo que se podría definir como visión humanista de estas montañas. Este espíritu dio lugar a una corriente conocida como guadarramismo.

Según sus palabras: “Los montañeros tenemos, ahora, una deuda con los pioneros. Deberíamos ser más generosos y contribuir, en un renovado movimiento guadarramista, a recuperar la Sierra abandonando el excesivo mercantilismo de sus usos”.

Con esta filosofía Sánchez Constenla, arropado por Ecologistas en Acción, emprende una travesía integral en solitario, alternado el esquí de fondo y travesía. Durante tres jornadas, del viernes 4 al domingo 6 de marzo, recorrerá los ciento veinticuatro kilómetros que separan el puerto de Somosierra del puerto de Malagón, en San Lorenzo de El Escorial.

Esta iniciativa quiere llamar la atención de deportistas, demás usuarios de la Sierra y de las administraciones implicadas en su gestión. Se puede disfrutar de la Sierra y de sus recursos sin mercantilización y sin destrucción. No se está promoviendo el cierre de la montaña a los ciudadanos, sino un cambio y limitación sensata de actividades y usos respetuosos con el medio, como prácticas de esquí más sostenibles como el esquí de travesía o montaña y fondo que no requieren instalaciones.

La travesía se realizará sin requerimiento de ninguna infraestructura de apoyo, usando sistemas de orientación GPS y con un equipo ligero para un día, adaptado a cada una uno de los tramos.

No se han encontrado datos de que esta travesía, en las condiciones indicadas, se haya realizado anteriormente.

Justificación

124 km esquiando por la dorsal de la Sierra de Guadarrama en pos de un nuevo Guadarramismo
Somosierra­ – Abantos­ – Puerto Malagón (San Lorenzo de El Escorial)
4­, 5­ y 6 de marzo de 2016

La Institución Libre de Enseñanza con Giner de los Ríos, Bartolomé Cossío y Bernaldo de Quirós, entre otros, a partir de sus experiencias pedagógicas en la Sierra de Guadarrama, sentaron las bases de lo que podría definirse como una visión humanista de estas montañas. Esta opción pedagógica se fundamentaba en que los recursos naturales, culturales o paisajísticos de la Sierra suponían un gran beneficio para la educación, para la salud del cuerpo y de la mente, para el conocimiento científico y la creatividad artística.

Todo ello dio lugar a una corriente conocida como Guadarramismo que se prolongó durante años con aportaciones de científicos, deportistas, artistas, hombres y mujeres, todos ellos pioneros y que nos legaron un valioso patrimonio cultural con esta nueva forma de mirar la Sierra de Guadarrama y a nosotros ahora nos corresponde preservar ese valioso legado.

Sin embargo, en los últimos años del siglo XX y primeros del siglo XXI, la Sierra de Guadarrama no ha dejado de sufrir agresiones hasta hacerla enfermar. Los poderes económicos en connivencia con los políticos han promovido un aprovechamiento exagerado e insostenible de unos recursos naturales limitados. Esta dinámica ha generado una excesiva presión urbanística, de grandes infraestructuras y de turismo sobre este frágil ecosistema de montaña. Sus resultados son la masificación y la pérdida irreversible de sus valores ambientales, culturales y paisajísticos lo que en un círculo vicioso llega a degradar incluso su atractivo turístico.

El pronóstico es grave y como todo enfermo, nuestra Sierra necesita diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y seguimiento. La declaración de Parque Nacional pudo ser una oportunidad para remediar este proceso degenerativo. Sin embrago, ya desde sus inicios, sus promotores, fueron poco ambiciosos y condescendientes con la enfermedad. No quisieron atacar el origen de la misma, la lógica de los mercados tendente al aprovechamiento exclusivamente mercantil de sus recursos.

Esta ausencia de prevención ha propiciado que los responsables políticos de las comunidades autónomas de Castilla y León y Madrid hayan convertido la declaración del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama en una caricatura.

El síntoma más evidente de esta patología serrana, que no el único, es la degradación del Puerto de Navacerrada. Este paso natural entre las dos Castillas, ha sido centro neurálgico de la Sierra de Guadarrama y lugar emblemático del montañismo madrileño, testigo directo de la actividad cultural, científica y deportiva del Guadarramismo y nacimiento del deporte del esquí en nuestro país.

Manuel Gonzalez de Amezúa, fundador del Twenty Club, en 1907 y el Club Alpino Español en 1908, a quien se le puede considerarse como el introductor del esquí en España en 1903, reparó en las extraordinarias condiciones que las inmediaciones del Puerto de Navacerrada, laderas del Ventorrillo, reúnen para ejercitar los deportes de nieve, especialmente el esquí, al estilo de lo que ya se venía haciendo en los Alpes.

Hoy ­ya sea por desidia de sus gestores o por favorecer intereses privados­se ha convertido en un ejemplo de mala praxis ambiental, modelo de lo que no debe ser un desarrollo sostenible. El Puerto se excluyó, tanto del ámbito del Parque Nacional como de su zona periférica de protección, a pesar de estar enclavado en uno y otra. Alberga una estación de esquí privada inviable por la cada vez más escasa innivación que además se asienta sobre monte público. Esta instalación deportiva, lejos de transformarse a usos más sostenibles, como sucedió en el caso de la estación de esquí de Valcotos, en el Puerto de los Cotos, estuvo a punto de conectarse con la estación de esquí de Valdesquí. Tuvo que ser una sentencia judicial, a un recurso interpuesto por Ecologistas en Acción, la que abortase esta posibilidad.

El Puerto de Navacerrada también ha sido escenario de eventos deportivos multitudinarios, como la ascensión a la Bola del Mundo, en las ediciones de 2009 y 2012 de la Vuelta Ciclista a España.

Otra actividad preocupante son las carreras de montaña, cada vez más frecuentes y con mayor número de participantes que discurren por zonas de cumbres muy sensibles. Estas pruebas se autorizan al amparo de la inexistencia del PRUG (Plan Rector de Uso y Gestión) del Parque Nacional. Resulta desalentador que la mayoría de los organizadores de estas competiciones sean clubes de montaña, algunos de larga tradición guadarramista.

Los montañeros tenemos ahora una deuda con los pioneros. Deberíamos ser más generosos y contribuir en un renovado movimiento guadarramista a recuperar la Sierra. No estamos promoviendo el cierre de la montaña a los ciudadanos, sino un cambio y limitación sensata de actividades y usos respetuosos con el medio: como prácticas de esquí más sostenibles como el esquí de travesía o montaña y de fondo.

La filosofía de esta travesía integral con esquís en solitario de la Sierra de Guadarrama, responde a ese profundo y antiguo sentimiento de los albores del guadarramismo: dosis de gran aventura que todavía nos propicia la Sierra, bajo condiciones climatológicas adversas, y el profundo amor y ganas de vivir que la Sierra nos ofrece gratuitamente y que ingratamente correspondemos.

En definitiva, los motivos profundos para acometer esta empresa son: La preocupación por lo que se percibe como una realidad, la Sierra se nos muere. La inquietud por las generaciones futuras, porque nuestros hij@s y niet@s puedan seguir disfrutando de su aire limpio, de sus silencios, de sus roquedos, de sus bosques y fauna salvaje, del reto de la aventura, del esfuerzo por la cumbre y de todo el legado que nos enseñaron los pioneros de la Sierra.

Todo eso es la Sierra y, desde luego, mucho más que chalets, centros comerciales, aparcamientos, restaurantes y estaciones de esquí.

Félix Sánchez Constenla

Ficha técnica

Travesía integral con esquís. Somosierra – San Lorenzo de El Escorial: 124 km 3 Jornadas.

1ª Jornada: Puerto Somosierra – ­Puerto Navafría, por la “pista horizontal”

  • ­ Modalidad de Esquí: Fondo por la pista horizontal
  • ­ Distancia 48,5 km.

2ª Jornada: Puerto Navafría­ – Puerto de los Cotos­ – Puerto Navacerrada por los Montes Carpetanos, Macizo de Peñalara.

  • ­ Modalidad de Esquí: Travesía o Montaña.
  • ­ Distancia: 36 km (por Loma del Noruego, Bola del Mundo). 34,2 Km ( por Vía del Funicular).

3ª Jornada: Pto. Navacerrada – ­Pto. de Guadarrama­ . Abantos­ – Puerto de Malagón – San Lorenzo del Escorial por Camino Schimdt y GR 10.

  • ­ Modalidad de Esquí: Fondo
  • ­ Distancia 39,6 km.

Observaciones:

La travesía que se pretende realizar se ha programado por jornadas independientes, por lo tanto es totalmente viable. En cuanto a los antecedentes de esta travesía, en la “literatura” no se ha encontrado que se haya hecho anteriormente.

Las fechas para realizarla dependerá de las condiciones nivológicas y atmosféricas adecuadas. Hay que tener en cuenta que se pasa por tramos de cota baja, como el Puerto de Guadarrama con 1.511 metros, siendo uno de los puertos más bajos que comunican ambas Castillas. Por tanto la cota de nieve es un factor limitante para la realización de esta actividad.

Los procedimientos de orientación y comunicación que se usará serán convencionales, usando sistema de orientación vía satélite, tipo GPS, y comunicación vía teléfono móvil en situaciones de emergencia.

El equipo que se llevará cada jornada de viaje será ligero para un día. El peso de la mochila es determinante para el éxito de esta empresa. No se usaran sacos de dormir, ni fundas de vivac, ni ropa extra.