Ecologistas en Acción de Cieza, a través de un comunicado de prensa, ha expresado su más absoluto rechazo a las corridas de toros que estos días se han celebrado en Cieza. Un espectáculo que califican de “cruel y sangriento, que busca la diversión a través de la tortura y el ensañamiento con el toro, evidenciando un absoluto desprecio por los derechos de los animales”.

Explican que las corridas de toros son un espectáculo que trasmite y exalta los valores más negativos de una sociedad, como el uso injustificado de la violencia, el desprecio hacia los derechos de los animales, o el disfrute con la tortura y el maltrato animal”. Y condenan especialmente el que se siga permitiendo la asistencia de menores a este tipo de espectáculos.

La organización ecologista no entiende por qué Cieza fue reconocida por Unicef Murcia como Ciudad Amiga de la Infancia en Noviembre de 2016, cuando organizaciones como la ONU aseguran que la tauromaquia contraviene la Declaración de Derechos del Niño. Y recuerdan que otros ayuntamientos, como el de Palma, León o Utrera, comienzan a preocuparse por las repercusiones que en las niñas y niños pueden tener la contemplación de un espectáculo tan sangriento y aberrante y han dictado normativas para prohibir su entrada, e incluso impuesto sanciones cuando no se cumplían, con el fin de proteger a la infancia.

Para Ecologistas en Acción las corridas de toros y los festejos taurinos en general son, incomprensiblemente, todavía frecuentes en algunas regiones, como es el caso de Murcia, y aunque el número de aficionados ha descendido en los últimos años, lo que se reflejó con solo una quinta parte de la plaza de toros llena el pasado 27 de agosto. Es el apoyo político y económico de las administraciones locales y autonómicas el que está manteniendo esta actividad.

27/8/2017. Plaza de toros de Cieza, desde la puerta de arrastre. Se aprecia muy poco público, apenas una quinta parte del aforo.

Un sondeo llevado a cabo por Ipsos MORI en 2015, indica que el 84 % de las personas encuestadas entre 16 y 24 años de edad aseguraron estar «poco o nada orgullosas» de vivir en un país donde la tauromaquia es una tradición cultural, siendo este porcentaje del 67 %, entre las personas encuestadas entre 16 y 65 años de edad. Por otra parte, el 73 % de las personas encuestadas aseguraron no estar de acuerdo con que se den ayudas públicas a la industria taurina y el mismo porcentaje no está de acuerdo con que se utilicen fondos públicos para promover la tauromaquia como parte del patrimonio nacional de España.

La organización ecologista entiende que desde el ayuntamiento de Cieza debe dejarse de colaborar con cualquier espectáculo que contribuya al mantenimiento de la tortura animal. Y en ese sentido, pide al Ayuntamiento de Cieza transparencia en cuanto a esa colaboración porque la ciudadanía tiene derecho a conocer de qué manera y qué concejalías colaboran con este tipo de fiesta privada.

Finalmente, Ecologistas en Acción concluye que un espectáculo cruel, sangriento y violento no puede ser considerado “Fiesta nacional” de ningún país que se considere civilizado, y mucho menos financiado con dinero público. Los impuestos que todos pagamos, explican, “no pueden seguir alimentando una fiesta basada en la crueldad y tortura hacia los animales”.