• Un nuevo informe señala que se está muy lejos de limitar la temperatura global, mientras persisten compromisos climáticos desiguales e injustos.
  • Ecologistas en Acción avala el informe y demanda un diálogo mundial en 2018 que logre el necesario ajuste a las evidencias científicas para frenar el incremento de la temperatura global.

Organizaciones internacionales de la sociedad civil publican el informe ‘Equidad y aumento de ambición: hacia un Diálogo Facilitado que sea efectivo en 2018’. El Diálogo Facilitado es un proceso que se estableció en la Acuerdo de París para concretar cómo poner en marcha dicho acuerdo. Este Diálogo Facilitado debe reorientar en 2018 los compromisos de mitigación hacia contribuciones justas y equitativas adquiridos por la comunidad internacional.

Equidad y aumento de ambición

A punto de finalizar la primera semana de la COP23 en Bonn, decenas de organizaciones internacionales, entre ellas Ecologistas en Acción, avalan este informe que revisa y amplía los estudios presentados en la COP21 de París.

El nuevo trabajo manifiesta que se está muy lejos de limitar la temperatura global por debajo de 2 ºC antes del fin de este siglo. De hecho, los compromisos de los países más enriquecidos no llegan a cubrir lo que sería una contribución justa. Esto genera una brecha de 15 GtCO2eq adicionales que es necesario reducir en 2030 para ajustarse a lo que indica el IPCC.

El Diálogo Facilitado que se producirá en 2018 (FD 2018, por sus siglas en inglés) es el momento para evaluar y corregir la falta de compromiso colectivo. También es un momento clave para que los países cumplan con su responsabilidad. Un proceso que debe estimular un aumento en la acción climática y dar como resultado propuestas concretas que hay que poner en marcha en 2020. Si no lo hace, comprometerá seriamente la lucha climática y pondrá en peligro los límites planetarios, con consecuencias devastadoras en todo el mundo.

Se trata de no sobrepasar las 450 ppm de concentración de CO2 en 2020, para lo cual hay que destinar más de 375.000 millones de dólares anuales en los países del Sur global, que deberán llegar a 1,3 billones de dólares en 2035.

El estudio vuelve a confirmar la necesidad de adaptar los ecosistemas, naturales y humanos. “Una adaptación que supondrá un coste de entre 140.000 y 300.000 millones de dólares anuales en 2030, y que se multiplicará por cinco en 2050”.

Este dato pone de relieve que el Fondo Verde para el Clima, presupuestado con 100.000 millones de dólares, “está muy lejos de las necesidades reales”.

Ecologistas en Acción exige una vez más que no se dilate más una mayor ambición en los compromisos de reducción de emisiones de CO2 y en la financiación de la adaptación a las consecuencias del cambio climático, así como de las pérdidas y los daños causados por el mismo.

Para esta organización la justicia climática y los derechos humanos deben ser el centro del análisis político, en referencia al aumento de personas migrantes que son refugiadas climáticas, al continuo expolio de los recursos naturales y a la falta de capacidades técnicas y económicas del Sur global para hacer frente a los efectos de la desertización, el aumento de temperaturas y la falta de recursos hídricos.