Ecologistas en Acción pide el cierre definitivo de la central nuclear de Ascó después de que 14 operarios hayan sido contaminados por agua radiactiva del circuito primario.

La apertura accidental de una válvula del circuito primario mientras se procedía a la calibración de un de los cuatro canales de recirculación semiautomática desde los sumideros del edificio de contención ha esparcido unos 25 m³ de agua radioactiva que ha alcanzado a 14 operarios que participaban en las tareas de recarga de Ascó I, alcanzándoles el agua radioactiva a los tobillos.

Aunque se ha procedido a la evacuación de los operarios del área contaminada, así como a la retirada del calzado contaminado y a los controles radiológicos que en principio descartan contaminación radioactiva interna, se trata de un accidente sumamente grave ya que existe un riesgo inherente para la salud de los trabajadores por la dispersión inevitable de material radioactivo.

A pesar que el circuito primario disponga de filtros de resinas de intercambio iónico que tienen como función la retención, a priori, de la radioactividad, existen tres tipos de isótopos radioactivos que pueden escapar al filtraje. Concretamente se trata del tritio, el iodo 131 y el cesio 137, los cuales también han sido liberados en el accidente de Fukushima.

Por otro lado aunque se ha comunicado la retirada del agua contaminada del pozo seco, no se ha determinado cual ha sido su nuevo destino.

Para Ecologistas en Acción se trata de un accidente, por mucho que el operador haya declarado que “se trata de un procedimiento no muy adecuado”, por ello y ante los múltiples sucesos que se están produciendo en la central nuclear de Ascó, Ecologistas en Acción demandará una investigación al CSN.

No obstante y ante la más absoluta ausencia de seguridad en Ascó, Ecologistas en Acción exige nuevamente el cierre inmediato de la central, es por ello que pide que no se renueve la licencia de explotación cuyo vencimiento se produce a finales de este año para los dos grupos.